sábado, 14 de noviembre de 2009

Conocimiento

PRESENTE

Me gusta conocer a la gente, no hablo de superficialmente
hablo de que poca gente se toma la molestia de conocer profundamente
a las personas de su alrededor.
Yo, personalmente, no soy así, me entretengo buscando pequeños rasgos
imperceptibles, acciones repetidas que dan paso a los hábitos, manías y gustos.
Observo y analizo detenidamente a la gente que me rodea, intento averiguar
como funciona su mente y esto me resulta curioso pues no logro comprender
la mía propia...
Podría pasarme el resto de mi vida buscando un motivo para mis razones,
intentando entender lo que hago, lo que pienso o incluso mi manera de ser,
pero no lograría conocerme. Aún me sorprendo actuando de un
modo inesperado y me pillo a mi misma desprevenida.
Pero a pesar de ello, no me resulta demasiado difícil llegar a conocer a las personas
supongo que se trata de esa pequeña obsesion que tengo de calcularlo todo, busco
ponerlo todo dentro de una ciencia inmutable que rige el mundo.
Supongo que mi subconsciente piensa que si todo lo analizo y lo calculo no cambiará
y se mantendrá siempre así igual que todas las ciencias y esto es debido a mi miedo a
los cambios, me aterran.
Mi teoría es que si lo que me rodea esta medianamente bien, por qué debe cambiar,
si puedo ir a mejor pero... ¿y si va a peor? Cómo construiré de nuevo ese futuro que
tanto me había costado diseñar? Es ridículo, lo se, pero acaso no lo hemos sido todos
alguna vez en nuestra vida.
Pienso que si mis fallos y defectos no hacen daño a nadie no debería cambiar una
manera de ser que lleva conmigo desde que soy así. Por lo tanto continuaré con
mi obsesión frenética de analizar a las personas, aunque me resulte incomprensible
el hecho de conocer mejor a la persona que está sentada a la izquierda de mi pupitre
que a mi misma. Esto debe de ser un problema, si nunca llego a conocer a mi yo
interior jamás podré convivir con él y por consiguiente seguiré perdida en esa
disputa interior la cual no me permite tener una seguridad plena de las deciciones
que tomo.
Me doy cuenta de este error, pero repito me dan miedo los cambios por lo tanto
no cesaré de observar y tomar notas mentales de todos aquellos que me rodean
para incluirlos en muchos otros de mis cálculos sentimentales mentales.

1 comentario:

  1. Me pasa igual, aunque no sé si hasta cierto punto es un defecto. Me explico, creo que tanto tú como yo necesitamos sentir que tenemos siempre las situaciones bajo control, de ahí la necesidad de calcularlo todo. Siempre he pensado que de hecho, esta necesidad de calcular, surge del miedo, del miedo a vivir, del miedo a equivocarnos, del miedo a que puedan hacerte daño. Me gustas como persona, mucho :)

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